La que empieza a contemplar la figura de Jesús en el mismo punto y momento en que los historiadores y exegetas dan por finalizada su labor de fijar y presentar al «Jesús de la historia».
¿Quién es Jesús-Emmanuel? Son tantos los rostros del Señor, como las caras luminosas de un diamante tallado. Cada faceta da una luz diferente del mismo y único diamante.