La originalidad de esta obra reside en darle voz a los silenciosos personajes del Evangelio. Aunque el silencio normalmente da miedo. Por otra parte, ¿quién no tiene miedo… del silencio, y luego descubre sus virtudes?
Vivir con la enfermedad muchas veces es inevitable. Sabemos que es poco probable que la enfermedad desaparezca. De hecho, se transforma en una fuerza determinante en la vida cotidiana.