La autora nos presenta un volumen de gran calado espiritual, de una extrordinaria agudeza teologica, literaria e historica y de una inigualable belleza y elegancia discursiva.
La autora ofrece dos ejercicios de interiorización. El primero para la reconciliación consigo mismo, y el segundo para la reconciliación con el otro. Es una yuda valiosa y eficaz para generar procesos de paz, comenzando por la sanación del propio corazón.