ROSARIO MEDITADO (EDIBESA)

Una de las expresiones más felices de Pablo VI al hablar del Rosario, que cada día recitaba íntegramente, fue: "El Rosario es el compendio de todo el Evangelio". Pero no puede reducirce esta afirmación al enunciado de los quince misterios. Las dos oraciones fundamentales del Rosario- el Padrenuestro y el Avemaría- son evangélicas. Y mientras se recitan estas oraciones, de origen divino, hay que tener como telón de fondo para la meditación el misterio de la vida de Cristo y de María que se está rezando.