La recuperación de la dimensión relacional puede constituir un elemento de novedad y renovación de la Vida Consagrada que evite la nostalgia y el cansancio, el balance de cuentas y el cierre de actividades.
Este libro, nutrido con numerosos testimonios, se pregunta también por el futuro de unas comunidades que tienen que hacer frente a la crisis de vocaciones.
La autora ofrece dos ejercicios de interiorización. El primero para la reconciliación consigo mismo, y el segundo para la reconciliación con el otro. Es una yuda valiosa y eficaz para generar procesos de paz, comenzando por la sanación del propio corazón.
«El abuelo dijo: “En la vida hay tristezas y hay alegrías, hay derrotas y victorias, hay fracasos y éxitos... Y no lo digo para que desesperes, sino para hacerte ver la realidad.
Esta antología definitiva es el precioso legado de Nouwen a sus lectores, pues fue supervisada por él mismo meses antes de su muerte. Ofrece una verdadera fortaleza frente a los desafíos de nuestra vida y señala el camino para renovar nuestra espiritualidad.