Este libro recoge el testimonio cálido y lúcido de la vivencia experimentada por el autor como creyente cristiano, que busca en la plegaria -reflexiva, contemplativa y expectante- encontrar, actuar y percibir la misteriosa entraña de su fe religiosa.
Para cada día del año este libro nos ofrece unas frases cortas e inspirativas, que llevan a la dimensión del sentido de la vida que a menudo perdemos de vista: impulsos para ser conscientes, invitaciones a hacer una pequeña parada durante el día.
El P. Ch. Dumont conoce muy bien a san Bernardo y a los grandes pensadores y filósofos de nuestro tiempo y siempre nos hace ver la sintonía existente entre unos y otros.
A traves de esta reflexion queremos acompañar a Juan Pablo II y ahondar en su meditacion sobre la vocacion unica de la mujer en dos de sus dimensiones maternidad y virginidad.
El autor recorre los lugares santos donde transcurrió su vida Jesús, Hijo de Dios y de María. Durante ese recorrido se detiene a meditar los veinte misterios del Santo Rosario, agrupados e cuatro capítulos: misterios de gozo, luminosos, dolorosos y gloriosos.
Pretendo que este libro sea un humilde servicio a los que sufren. Más que razonamientos sobre el dolor, son como una lluvia de ideas que arrancan de mi experiencia con la gente que sufre.
En estas páginas se convoca a la cascada de las horas del día y de la vida: horas de albora-da, horas de calor, atardeceres y nocturnos, horas de consolación son como una escala por la que pasan todas las cosas, todas las emo-ciones, desde el sol hasta las arenas del de-sierto.
«Jesús quiere enseñarnos el arte de vivir en plenitud, el arte de ser felices». He aquí unas oraciones que te permiten experimentar y sentir lo que es orar. Palabras que te ayudan a entrar en contacto con Dios tal y como eres.
En este volumen se los presenta completos y abarcan: textos legislativos, oraciones, cartas, avisos espirituales y las llamadas "últimas recomendaciones".
«Es posible que al principio no lo adviertas, pero poco a poco llegas a comprender que Jean Vanier te pone en contacto con ese espacio interior en el que pocas personas han entrado».
¿Es posible seguir esperando? ¡Sí! Porque el significado, la dirección y el destino vienen de Dios; Él lo conoce todo y, con Él, el hombre no puede sentirse nunca perdido.
Tras, Coloquios nocturnos en Jerusalén, Martini, dialoga, en esta ocasión con Luigi Maria Verzé, en una apasionada alternancia de preguntas y respuestas sobre los temas y problemas que afectan a la Iglesia y que ya no se pueden aplazar.